El servicio de recolección y transporte de residuos es uno de los elementos clave en la gestión integral de residuos sólidos, y quizá por su costo, complejidad y sensibilidad a temas de salud ambientales, es el elemento central para la mayoría de la GIRS de una municipalidad, que deben trasladar los residuos sólidos desde los centros de generación para preservar la salud pública y la protección al ambiente.
Históricamente, la gestión de los residuos sólidos se asociaba con la recolección y transporte, así como la de tratamiento y disposición. Las municipalidades por lo tanto desarrollaban su gestión centradas en estas actividades.
Hoy en día, sin embargo, la adopción cada vez más fuerte de la valorización de los residuos, hace muy importantes otras actividades como la reducción, el reciclaje, el compostaje y la recuperación.
Así la valorización debe verse con igual importancia que esas actividades de recolección y transporte, pero en tema de costo y complejidad, el sistema de recolección y transporte seguirá siendo la actividad central de la mayoría de municipalidades en materia de GIRS.
El siguiente esquema muestra el proceso para el diseño de un sistema de recolección y transporte.
Está claro que además de estos factores técnicos, existen factores institucionales y financieros que terminan definiendo el tipo de sistema de recolección y transporte de residuos sólidos, todos los cuales en conjunto marcan las posibilidades y limitaciones de la municipalidad para adoptar un sistema óptimo.
Esquema de diseño de un sistema de recolección y transporte
Fuente: SEDESOL (2016)
El reto de una municipalidad es “la recolección de los residuos en todos los centros de generación y transportarlos al sitio de tratamiento y disposición final, de la manera más sanitaria posible, eficientemente y con el mínimo costo”.
El diseño de las rutas de recolección de los residuos sólidos es uno de los aspectos clave del sistema de recolección y transporte municipales, y consisten en la definición de los recorridos específicos que deben realizar diariamente los vehículos recolectores en sus zonas de la comunidad.
Lo común en el diseño de rutas de recolección ha sido el juicio y la experiencia de los encargados de la definición de las rutas, como un proceso de prueba y error. La mayoría de las rutas de recolección diseñadas bajo este procedimiento acarrea problemas de diseño. En el siguiente link se pueden ver algunos problemas de un mal diseño de rutas.
El diseño de las rutas de recolección debe observar algunas reglas básicas, las cuales se ofrecen en el siguiente link sobre reglas básicas para el diseño de rutas.
Además, es necesario lograr un proceso participativo de actores relevantes para incorporar sus opiniones a las decisiones que se tomen en el mejoramiento de las rutas de recolección de los residuos sólidos. Además, “es indispensable informar adecuadamente al público de las razones que hay para hacerlo y llegar a obtener su colaboración” SEDESOL (2016).
El diseño de un sistema de recolección y transporte de residuos sólidos depende de varios factores técnicos, y a continuación se destacan los principales:
- Situación del sistema
- Sectorización de la comunidad
- Generación de residuos
- Tipos de residuos sólidos
- Método de recolección
- Frecuencia de recolección
- Ajuste por día de la semana
- Capacidad de los vehículos
- Número de viajes por vehículo
- Número de vehículos
- Distancia recorrida por vehículo
- Número de usuarios cubiertos por vehículo
- Tamaño de la cuadrilla de recolectores
- Mejora de la ruta diseñada
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